"Por eso, más que felicitarse por "tener una emisión", los cristianos deben preguntarse a qué sirven, sin saberlo, cuando se convierten en objetos de consumo, de espectáculo y de interés, cuando la experiencia real de creyentes sin nombre público, en las calles y en los pueblos, es obliterada por la llegada al estrellato de la impugnación o de los pontífices. El eco resonante dado por la prensa, la radio o la televisión a los requerimientos interiores de la Iglesia, ¿no elimina la exigencia espiritual que quieren testimoniar, para transformarla en "un metal que suena, o campana que retiñe" (1 Cor 13, 1)?¿Vamos a ratificar ese papel especular y teatral?"
Michel de Certeau, "Autoridades cristianas y estructuras sociales", en La debilidad de creer, Katz, 2006.
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