sábado, 25 de octubre de 2008

YVES CONGAR, OP. La conciencia eclesiológica en oriente y occidente del siglo VI al XI. Herder, 1962



Esta pequeña obra recoge un artículo publicado por Yves Congar en la revista Istina(http://www.istina.eu/), dedicada a los estudios sobre la unidad de los cristianos de oriente y occidente, en 1959. Muchos años más tarde no observo, en la vida eclesial de la cotidianidad de una diócesis pequeña como la que me acoge, una aproximación importante entre la Iglesia Católica y la Ortodoxa, aunque sé que el diálogo sigue en marcha a través de diversas iniciativas. Quizás una separación que tiene ya diez siglos necesita mucho tiempo para ser superada, pero nuestro querido Congar puso su granito de arena en esa tarea.

El librito que hoy tenemos entre manos puede ilustrarnos mucho sobre la génesis de esa separación y los aspectos teológicos que la sustentan, sirviendo además (como siempre en Congar) como reflexión sobre la eclesiología y como riquísima fuente documental sobre el tema, gracias a una exhaustiva bibliografía.

Un par de migajas del texto:

(sobre la fundamentación evangélica del primado romano):

"... nos parece que reviste verdadera importancia el hecho de que el oriente, sin desconocer la aplicación del texto de Mt 16, 18 ("sobre esta piedra") a la persona del apóstol Pedro, haya preferido interpretarlo en el sentido de la piedra de la fe del apóstol o de su confesión" p. 58.

(sobre la tensión universalidad-localidad en las dos Iglesias):

"Nos parece correcta la siguiente observación de Baumstark, siempre que no sea llevada al extremo: el occidente aborda la realidad eclesial de manera analítica, piensa espontáneamente en el todo y considera las Iglesias particulares como partes de este todo; en oriente se piensa primero en la comunidad concreta, local y después en la unidad de todas estas comunidades, unidad que existe místicamente en el cuerpo de Cristo y se realiza eclesiásticamente por la comunión de las Iglesias y por su unanimidad en la fe, cuyo órgano y expresión es el concilio ecuménico (sus cánones pasan a ser leyes públicas del imperio por la autoridad del emperador)" p. 31.

Es sorprendente que este texto sea tan solo tres años anterior al Concilio Vaticano II, donde tanta importancia tendría Congar y su visión de la Iglesia (por ejemplo, la categoría teológica de "recepción", que incluye la relación entre las disposiciones de la jerarquía romana y la forma en que se reciben por el pueblo, y que tiene un importante lugar en esta obra que reseñamos).

Juan Diego González,

Amén.

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