jueves, 1 de noviembre de 2007

Pilares de la Comunidad Amén

6. FAMILIA.

“Vosotros seréis mi pueblo.” Ez 36, 28.

Esta Comunidad está formada en parte por familias y, también en parte, gracias a su vida cotidiana existe y se desarrolla. El compromiso que las familias tienen consigo mismas de ser fieles a Dios, que se expresa en el amor mutuo de la pareja y en el nacimiento y cuidado de los hijos por parte de los padres, es algo que da a la Comunidad esperanza de un futuro de fidelidad. Que una familia opte por ser fiel a Dios es una de las mejores expresiones del pueblo que reconoce tener a Dios por Rey.

Por todo esto, Amén valora a sus familias como un tesoro, y hace esfuerzos por cuidarlas y permitir que se desarrollen, ayudando a profundizar a las parejas en la vocación familiar que han recibido, pues entiende que sin ellas perdería una parte fundamental de su ser. Al igual que la Comunidad necesita espacios de intimidad para crecer buscando la voluntad de Dios, las familias también los necesitan, y es nuestra firme intención buscar esos espacios y respetarlos.

Cada familia está llamada a vivir dentro de si la radicalidad del mensaje evangélico, siendo germen de la familia universal, de la cual la Comunidad no es sino un primer paso. Es una responsabilidad especial de cada familia el conseguir aprovechar las oportunidades que la Comunidad le brinda, para crear este ambiente entre sus miembros, por ejemplo, en cuanto a la oración, que debería tener su comienzo en el núcleo familiar. Solo así podrán estos iluminar al resto de la Comunidad y junto con ella ser sal de la tierra (Mc 9, 50).

Dentro del vivir comunitario aquellos miembros que, por su opción o su circunstancia, no han formado una familia, tienen también una gran responsabilidad: cuidar y acompañar a las familias, siendo instancia crítica que las sacude y confronte, siendo un ejemplo para ellas de entrega, disponibilidad, oración y alegría.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me viene muy bien todo lo que decis sobre la importancia de la familia,cuando yo doy mis charlas a los novios,que se van a casar,les digo que su primer amor es el de la novia,pero ese amor viene de Jesús.no me extiendo mas porque no se si voy a saber mandarlo.